En sintonía con el trabajo y la rectitud de la Facultad de Minas

El profesor Jorge Iván Gómez nos deja un gran legado, un gran ser humano, luego de 41 años, finaliza su etapa como docente en la Universidad Nacional de Colombia y disfrutará de su jubilación.

 

 

Cuando finalizó sus estudios de secundaria siempre tuvo claro que quería estudiar ingeniería. En 1980 logró ese propósito al graduarse como Ingeniero Mecánico en la Universidad Tecnológica de Pereira.

 

A la Facultad de Minas se vinculó en 1981 después de presentarse a una convocatoria para suplir una vacante en el área de procesos de manufactura del entonces departamento de “Tecnología Mecánica”. Cuando inició, las cátedras que dictó fueron: Fundición e Introducción a los Procesos de Manufactura. Durante su permanencia en dicha área también abordó cursos relacionados con mecanizado y deformación plástica de metales.

 

Entre 1984 y 1986 estuvo en comisión de estudios realizando una maestría en Ingeniería Metalúrgica, con énfasis en fundición de hierro, en la Universidad de Wisconsin-Madison. Esta maestría también la pudo adelantar gracias al convenio Misión Técnica Suiza con el cual se le dio impulso al programa de Ingeniería Mecánica.

 

Al regresar, participó en el programa “Red Latinoamericana de Función”, apoyado por la agencia de cooperación canadiense “International Development Research Center”. A través de este programa se gestionó el apoyo a proyectos presentados por profesores de la U. de A. y la UNAL, y también se gestionó la capacitación a profesores de la U. de A. y del Centro Metalmecánico del SENA.

 

Siempre se destacó por mantener buenas relaciones e interacción con el medio industrial, como por ejemplo, con empresas como FEDEMETAL, SIMESA, FURESA, ya desaparecidas, donde en su momento se realizaron oportunidades de colaboración. Incluso el profesor Jorge cuenta que a FEDEMETAL se le brindó el apoyo académico en la organización del “Primer Congreso de Fundición Nacional” realizado en 1984.

 

Al profesor le tocó estar en la penúltima reforma académico administrativa llevada a cabo en la Facultad de Minas. “Esa reforma resultó en grave perjuicio para Ingeniería Mecánica dado que desapareció como departamento y como área curricular, viniendo a quedar como un apéndice de la Escuela de Mecatrónica”, explicó Jorge Iván Gómez.

 

En ese sentido, cuenta el profesor que, dicha coyuntura, lo obligó a asumir asignaturas de naturaleza diferente a las que había impartido en Procesos de Manufactura, entre las materias dictadas en este segundo período como profesor de la Facultad estaban: Los dibujos mecánicos, Estática, Dinámica y Mecánica de Sólidos.

 

Desde el 2005 hasta su jubilación el profesor Jorge asumió un tema de investigación concerniente a “las tolerancias dimensionales y geométricas'', “El nivel alcanzado me permitió la apropiación de dicho conocimiento, lo cual me condujo a ser coautor del libro ´Dimensionado y Tolerado Geométrico de Piezas Mecánicas´”, afirmó el docente a la vez que enfatizó en que, sobre este tema, se impartieron cerca de tres cursos de extensión y se creó una asignatura electiva.

 

Desde ese mismo año, se desempeñó como coordinador del Laboratorio Diagnóstico de Maquinaria, lo que le permitió apoyar el proyecto de “fortalecimiento de la metrología en la Sede”, a través de la creación de una Sala de Metrología Dimensional al interior de dicho Laboratorio.

 

“Hacia el 2005, junto con otros profesores, emprendí una lucha para que a Mecánica se le restituyera su independencia como Departamento y como Área Curricular, la que finalmente se concretó en 2012. Este fue un logro muy significativo para mí, dado los cambios que se propiciaron a nivel de identidad, tanto de profesores como de estudiantes. Dado los conflictos que se padecían al interior de Mecánica me tocó asumir la Dirección de Departamento entre 2011 y 2014”.

 

Sus colegas lo recuerdan como un ser pausado, amante de la naturaleza, defensor a toda costa de los derechos humanos e institucionales, “posee un agudo sentido de la ética y de la rectitud, durante toda su vida laboral actuó en sintonía con el lema de la Facultad de Minas, y lo hizo sentir cuando lo consideró en su afán de velar por la calidad de Ingeniería Mecánica; es metódico, diligente, reservado, cálido y tremendamente culto”, expresó la profesora María Eugenia Muñoz Amariles.

 

Igualmente, sus estudiantes como, por ejemplo, Simón Garcés Zapata, quien guarda un sentimiento de gratitud, “es de los pocos profesores que se enfrenta a la imperiosa tarea de intentar que sus alumnos se reten a otro tipo de razonamiento, más allá del académico. Nos inculcaba la importancia de ejercer éticamente esta bella profesión y como ser primero, buen ciudadano y luego el mejor ingeniero, en tiempos donde la productividad y los resultados parecen opacar todos los matices humanos que tiene la ingeniería”.

 

Andrea Guerrero, profesional de apoyo a la gestión de la Dirección de Laboratorios de Facultad, resalta como cualidades del profesor su sinceridad, su alto compromiso con la institución, con sus deberes y con sus estudiantes, además de su amor por la vida y por la naturaleza.

 

Luis Fernando Gil Bedoya, técnico del Laboratorio de Procesos de Manufactura, conoció al profesor en el 2004, y reconoce su trabajo incansable con los conceptos de ingeniería, desde la parte conceptual, del diseño, del dibujo y desde la parte de medición, “recuerdo que el profesor Jorge Iván tenía unos montajes experimentales para explicarles a los estudiantes todos los conceptos de metrología, que quizá es uno de los aportes más significativos que nos deja este gran académico”.

 

Respecto al ámbito personal, Gil Bedoya afirma que es muy proactivo, riguroso en los procesos, juicioso con las labores, un gran ser humano con quien desde el respeto siempre pudo tener un diálogo cordial a pesar de las vicisitudes que se presentaban en el camino, “otro de los legados importantes tiene que ver con sus aportes a la microgeneración de energía para la pequeña y mediana empresa”.

 

Fernando Guevara Carazas, profesor adscrito al Departamento de Ingeniería Mecánica aseguró que siempre fue transparente, y un luchador en defensa del departamento, no tuvo miedo ni "posturas políticamente correctas" cuando de decir la verdad se trataba. “Luchó siempre por unificar el departamento; lo recordaré como un perseverante y defensor de la calidad en la formación de los estudiantes y su gran legado, además de la lucha en defensa de Ingeniería Mecánica”.

 

Jorge Iván Álvarez González, profesor adscrito al Departamento de Ingeniería Mecánica manifestó que destaca su honestidad y transparencia en sus actos, así como su ferviente defensa por la calidad en la educación, “un luchador para que los principios trabajo y rectitud, lema de la Facultad de Minas, realmente sean los rectores del ejercicio académico”.

 

Fanny Zamarra Patiño, secretaria del Departamento de Ingeniería Mecánica cuenta que desde que llegó al Departamento, en septiembre del año 2000 tuvo la oportunidad de compartir con el profesor Jorge Iván y descubrir en él, un gran ser humano, trabajador, comprensivo, respetuoso, disciplinado y colaborador. “Destaco del profesor su interés en ayudar a los estudiantes y brindar un buen acompañamiento, otro aspecto en el que hizo una gran gestión fue en mejorar la seguridad del núcleo y el mejoramiento de los salones”.

 

John Willian Branch, profesor adscrito al Departamento de Ciencias de la Decisión y la Computación, enfatizó en que detrás de un impecable profesional, estaba una persona excepcional, un académico comprometido, quien siempre persistió en el cumplimiento de metas que procuraran el bien colectivo, “En su paso por la institución siempre buscó la manera de realizar críticas constructivas enmarcadas en el progreso, desde una posición siempre de mejoramiento,  de avance, de cambio, de transformación y de evolución; gracias Jorge por ese compromiso que tuviste con la universidad y que esperamos seguir manteniendo, hoy desde esta etapa que inicias en tu vida, después de haber desarrollado tu vida laboral, espero que puedas mantener esa conexión con la institución”.

 

Óscar Jaime Baena Restrepo, profesor adscrito al Departamento de Materiales y Minerales, quien lo conoció desde que era estudiante de pregrado y con quien tuvo la oportunidad de coincidir en proyectos de investigación, ya como docentes, lo recuerda como un profesor cercano a los estudiantes que siempre mantenía en la búsqueda de nuevas oportunidades, “un ser humano que siempre enfrentó las situaciones más duras de su departamento y buscó formas de trabajar en función de este, de su progreso y bienestar”.

 

El profesor Luis Alberto Arias López, director del Laboratorio de Sistemas Complejos Naturales y profesor asociado de la Escuela de Geociencias, expresó que, "Jorge Iván fue y es un profesor que expresa de manera integral, con rectitud y firmeza su resistencia y rechazo a las iniciativas de modernización empresarial de la institución universitaria. Tenía claro que la reforma en el departamento de Ingeniería Mecánica debía responder a un cierto equilibrio entre los aspectos exitosos heredados de la experiencia precedente y las nuevas realidades de la infraestructura y andamiaje mecánico de las empresas e industrias actuales".

 

Arias López añadió que, cuando compartían en asambleas de profesores, en foros o charlas personales debatían sobre ergonomía, del diseño ambiental de las infraestructura metalmecánica de las empresas industriales. "Con la jubilación de Jorge Iván, se van algunas apreciaciones sobre la manera de combinar un respeto a un pasado, que merece mantenerse y recuperarse, sin caer en idolatrías a que todo tiempo pasado fue mejor. Nunca lo vi como persona que rechazara las nuevas realidades, lo vi como una persona que planteaba que lo reciente hay que aprender a mirarlo con el sentido de la duda para así poder percibir en toda su dimensión lo novedoso".   

 

Edison Andrés Palacio Higuita, técnico operativo del Laboratorio Diagnóstico de Maquinaria, quien trabajó alrededor de 15 años al lado del profesor Jorge Iván, resalta como su principal cualidad la honestidad, la integridad, una persona con un código moral y ético, garante y respetuosa de las instituciones. “Abogaba por ese espíritu social, en donde el ingeniero que está en un entorno social siempre tuviera en cuenta las problemáticas del país”.

 

Finalmente, Palacio Higuita añadió que, el principal y más importante legado que deja el profesor fue el montaje del laboratorio de Metrología dentro del laboratorio de Diagnóstico de Maquinaria, en generar esa cultura metrológica en nuestros estudiantes, como una parte de un conocimiento transversal y esencial, “con él  también se montó una pequeña sala para calibración de instrumentos, desde el laboratorio nos apropiamos de esa necesidad de aprender a medir bien e inculcarle a nuestros estudiantes este hábito, y el profesor hizo una destacada labor, digna de admirarle y reconocerle”.

 

Gracias profe Jorge Iván por sus aportes y gestión… le deseamos un feliz descanso.

 

Por: AMR