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Smart collectors es un proyecto de un grupo de estudiantes de diferentes pregrados de la Facultad de Minas que se unieron en el curso de Seminario de Proyectos para buscar la solución a los problemas producto de la recolección de basuras en la ciudad de Medellín. 

 

Según los estudios preliminares desarrollados por este grupo de futuros ingenieros, en Medellín actualmente sólo se recicla un 13% sobre el total de residuos inorgánicos, este bajo índice de reciclaje impulsó la creación de Smart Collectors que permitiría que este porcentaje aumente al 30% por medio de un sistema de identificación y separación de los residuos.

 

Luis Ramírez, estudiante de Ingeniería Industrial asegura que con el dispositivo no sólo se disminuye la cantidad de residuos mal aprovechados “con este proyecto se resuelve una necesidad de los vertederos de la ciudad y se agiliza el trabajo de los recicladores para quienes es muy difícil hacer la separación de basuras, y en muchas oportunidades el almacenamiento de residuos orgánicos e inorgánicos genera que los segundos se contaminen y pierdan su valor”.

 

El dispositivo funciona por medio de un sensor que identifica el grado de humedad de los elementos depositados  y los divide en dos contenedores para su posterior ubicación, así lo explica Javier López de Ingeniería de Control “se pensó en hacer la separación midiendo la humedad del elemento, ya que hay estudios que indican que los residuos que no son aptos para reciclar- como cascara de frutas- presentan una humedad de entre el 20 y 60 %, entonces bajo este porcentaje de humedad es que se caracterizó la separación”.

 

Smart collectors se desarrolló mediante el perfeccionamiento de un sistema ya existente,  “lo que nosotros hicimos fue una adecuación a un sistema de separación, por ejemplo nos basamos en los porcentajes de humedad relativa de cada uno de los materiales y con esto diseñamos un sensor de humedad con el cual se detecta ciertas franjas de humedad en cada uno de los materiales” explica Aarón González de Ingeniería de Control.

 

Las señales emitidas por los sensores ordenan al sistema a qué caneca debe ir el elemento depositado. Este equipo, según los estudiantes estaría ubicado en los puntos de mayor recolección de basuras de la ciudad “primero hay que establecer los puntos más problemáticos, en los que más se concentran basuras” cuenta Arón González y agrega que es fundamental que el dispositivo esté fabricado en un material resistente a las altas temperaturas y a las condiciones propias de las calles.

 

Adicional a los recipientes puestos en puntos estratégicos, el grupo de compañeros diseñó una aplicación para teléfonos inteligentes que permite por medio de trivias y datos curiosos concientizar a los habitantes de la ciudad acerca de la importancia de reciclar y  darle un uso adecuado a los residuos, “se pensó diseñar para dispositivos móviles; es decir plataformas Android, iOS y Windows. La aplicación tiene un contenido variado, desde el uso y las capacidades de la caneca para que las personas la conozcan, hasta información de la correcta separación” comenta Alejandra Escobar de Ingeniería de Minas.

 

Para que este proyecto se implemente debe contar con el apoyo de la empresa encargada de la recolección de basuras de la ciudad que serían los encargados de la instalación y vigilancia de los recipientes, así como de la disposición final de los elementos allí depositados. Estos estudiantes planean perfeccionar el proyecto para hacerlo realidad y con esto disminuir los índices de contaminación en una ciudad que en el 2013 producía 56.000 toneladas de basura mensuales.

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