3 décadas de pasión por la docencia y compromiso institucional

Orlando de Jesús Arcila Montoya, profesor adscrito al Departamento de Energía Eléctrica y Automática, finaliza, luego de más de 31 años, su etapa como profesor en la Universidad Nacional de Colombia y disfrutará de su jubilación.

Aún recuerda el día en que se convirtió en profesor de la Facultad de Minas. Fue en el año de 1991 cuando trabajaba en la Oficina de Planeación de la Empresa Antioqueña de Energía, Orlando se encontraba en el bloque M4 realizando unas diligencias, cuando se le acercó José Amado Aguilar, director del departamento en esa época, y lo convenció de dictar los Laboratorios de ´electrotecnia´, ´circuitos´ y la teoría de ´electrotecnia´.

Un año más tarde, en julio de 1992, y a raíz de una convocatoria, para suplir cargos por jubilación, pasó de ser docente ocasional a conformar la planta profesoral de la institución, cuenta que se enamoró completamente de la profesión. Ese ´don´ lo lleva en la sangre, Orlando siguió el linaje de su familia, su padre, su hermana y sus tíos eran docentes, creció en un ambiente de académico, de libros, conocimiento y enseñanza-aprendizaje.   

Este Ingeniero Electricista egresado de la Facultad de Minas, cuenta jocosamente, que cuando tenía 10 años, en un traído del niño Dios, desarmó un carro de pilas, con el fin de revisar toda la circuitería y analizar cómo funcionaba, con tan buena suerte que al volverle a armar quedó funcionando, "desde pequeño era muy gomoso, quería saber cómo funcionaba todo". Con apenas 14 años, y gracias a unos libros en inglés que su padre importaba para dar clases, y que tenían que ver con electrónica, electrotecnia y electricidad, ayudó a montar la instalación eléctrica de la casa. Años más tarde, antes de ingresar a la universidad, realizaba diseños eléctricos, y también arreglaba televisores, equipos de sonido, betamax, todo lo que había en la época de electrónica.

Para Orlando lo más importante de la docencia, además de transmitir el conocimiento y preparar profesionales con altos estándares de calidad, es formar grandes seres humanos, que siempre lleven impregnado el lema de la Facultad de Minas, "trabajo y rectitud". 

“La universidad para mí lo es todo, ingresé sin tener claro que me iba a quedar toda la vida como docente, es un mundo apasionante, incluso, gracias a lo referente de la institución me invitan a una capacitación a la cooperativa de la Fábrica de los licores de Antioquia, y allá terminé conociendo el amor de mi vida: mi negrita”.

Sus colegas, estudiantes, y compañeros de trabajo lo recuerdan como un gran ser humano, Luz Marina Grisales, secretaria del Departamento de Energía Eléctrica y Automática, aseguró que es muy servicial, responsable y comprometido con su quehacer docente, “es de admirar su entrega a la docencia, su esmero para que los estudiantes aprendan cada día algo nuevo y diferente y que les sirva para la vida futura, siempre inculcando que todo trabajo se haga con ética; todos extrañaremos sus consejos y recomendaciones a la hora de desarrollar alguna actividad”.

Rosa Elvira Correa Gutiérrez, su colega desde 1992 cuando iniciaron ambos como profesores, manifestó que es un gran amigo, positivo, leal, participativo, un profesional con gran sentido de pertenencia por la institución, “durante varios años fue coordinador de los laboratorios de Laboratorio de Máquinas y Medidas Eléctricas y Laboratorio de Electrónica y Control. Participó activamente de reformas académicas, en proyectos liderados por el departamento, apoyó en múltiples obras de ingeniería en la Facultad de Minas, los diseños de los paneles solares con grupo de estudiantes con base en PAES y revisión de la infraestructura eléctrica de la Facultad de Minas. El profesor es un experto en peritazgos en casos judiciales donde está involucrado infraestructura eléctrica, con una amplia experiencia en la universidad, resolviendo con éxito los requerimientos solicitados por las partes actoras; demandantes, demandados y jueces de la república, con un tiempo de experticia alrededor de quince años”.

Aldemar Lugo Zabala, otro de sus grandes amigos enfatizó en que siempre tuvo una conducta intachable, y destaca su vocación y amor por su profesión, “un gran jefe, que apoya y propicia un desarrollo y crecimiento personal y profesional, y como legado nos deja la formación integral impartida a los estudiantes, su incondicionalidad para compartir el conocimiento sin reservas y amor por la profesión”.

Héctor Botero Castro, profesor del Departamento de Energía Eléctrica y Automática, lo define como un profesional diligente, con sentido práctico de la ingeniería, pero con rigor científico y metodológico, creador de soluciones tangibles. “Es un ejemplo y modelo a seguir, porque combina una personalidad sencilla y agradable, con una amplia experiencia como docente e ingeniero y como complemento, posee muchos conocimientos sobre procesos administrativos y de consultoría, los cuales quedarán como un legado a la universidad”. 

Freddy Bolaños Martínez, director de Área Curricular de Ingeniería Eléctrica y de Control destacó su alto nivel de compromiso con la universidad y con los objetivos misionales de la misma: docencia, investigación y extensión, “creo que uno de los aportes de Orlando fue su liderazgo en proyectos de extensión en la facultad y en la sede relacionados con la eficiencia energética y con las fuentes alternativas de energía. Es de resaltar en esta última labor, que el profesor ha fomentado la participación de estudiantes y egresados de nuestros programas”.

Juan Sebastián Callejas Ochoa,  egresado del programa de Ingeniería Eléctrica, aseguró que es de los docentes con los cuales se puede generar un vínculo fuerte, que perdura y llega a convertirse en una amistad, “es una persona en la cual se puede confiar y a su vez, debatir tranquilamente de situaciones académicas de distinta índole sin problema alguno, considero que su humildad para con los estudiantes es su mayor fortaleza, no se necesita estar inscrito en una de sus clases para hacerle algún tipo de pregunta, él a su manera siempre atiende a las personas y responde sus inquietudes. Lo considero mi maestro, tutor, aliado y amigo; le deseo para su vida mucha salud para que le permita disfrutar de su merecido descanso”.

Luis Sierra, estudiante de Ingeniería Eléctrica relata que estuvo con Orlando en el curso Eficiencia de Sistemas Energéticos, aseguró que en el profesor lo concientizó de las pequeñas acciones que se pueden hacer para ayudar a la conservación del medio ambiente, “su metodología de aprendizaje basado en proyectos reforzó mucho el trabajo en equipo, la tolerancia, la resiliencia, y el respeto por los integrantes del grupo, quiero extender un mensaje de agradecimiento por todos los conocimientos brindados y espero que siga siendo un modelo a seguir para esta facultad”.

Ernesto Pérez González, profesor del Departamento de Energía Eléctrica y Automática, dijo que su mayor aporte a la institución para optimizar la infraestructura eléctrica de los campus de la UNAL Medellín, enfocándose en el cumplimiento normativo y en la formación honesta de estudiantes. Al respecto, John Edwin Candelo Becerra, profesor del Departamento de Energía Eléctrica y Automática, destaca su compañerismo, y disposición para asumir nuevos retos, “el docente mostró a las nuevas generaciones que el compromiso y la disciplina combinado con la ingeniería permiten alcanzar grandes logros. Su paso por el departamento permitió ser de ejemplo para la nueva generación de ingenieros, deja una gran huella profesional y personal en todos”.

Luis Gabriel Restrepo, Asistente Administrativo de Infraestructura y Proyectos de la Facultad de Minas, también destacó el apoyo del Profesor Orlando en los procesos de diseños de las redes eléctricas e iluminación dentro de los proyectos de infraestructura que se desarrollan en su dependencia. “El Profesor Orlando siempre atendía las dudas que se presentaban en el desarrollo de los proyectos de la Facultad, garantizando que las instalaciones de las redes eléctricas e iluminación siempre estuvieran dentro del marco normativo y garantizando la mayor eficacia técnica”. Indica el arquitecto Restrepo que el docente adicionalmente, siempre apoyó el proceso de selección de los profesionales de apoyo en ingeniería eléctrica que prestan sus servicios en la UGA – IP de la Facultad, privilegiando siempre a los mejores alumnos y egresados que pasaban por su vida docente.

Finalmente, el profesor también se destacó por su trabajo en el Grupo de Investigación en Tecnologías Aplicadas ­ GITA – y su gran labor como director de los Laboratorios de Medidas y Máquinas Eléctricas y de Electrónica y Control, de este último entregó su cargo al profesor Fredy Edimer Hoyos Velasco quien será el nuevo director del Laboratorio de Electrónica y Control.