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A través del programa INNPULSA TEC 2020, de MinComercio, del que fue beneficiado el Centro de Desarrollo e Innovación, se ha generado un acercamiento con Pymes de diferentes sectores comerciales que permitirán el inicio de nuevos proyectos para la Facultad.

 

El programa INNpulsaTEC, es una iniciativa que busca que las entidades de soporte al ecosistema de innovación fortalezcan sus capacidades para promover la transferencia de conocimiento, la innovación y el desarrollo de tecnología al sector empresarial, en particular las pequeñas y medianas empresas, a través de una metodología integral que parte de la identificación de portafolios de servicios y tecnologías disponibles, así como unos procesos de entrenamiento, asesoría y fortalecimiento de capacidades y acciones de relacionamiento con el sector empresarial.

 

José Ignacio Maya, actual director del CD+i y docente de la Facultad, explicó que el Centro de Desarrollo e Innovación, en nombre de la Facultad de Minas, ha buscado desarrollar nuevos campos de acción y fuentes distintas a las del Ministerio de Ciencias para el desarrollo de investigaciones y/o proyectos. En ese sentido, encontró un espacio de trabajo con el Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones y el Ministerio de Turismo, Industria y Comercio, a través de la convocatoria del programa INNpulsaTEC 2020. Esta es una gran oportunidad para la Facultad, de generar un acercamiento directo con las pymes y aumentar el espectro de cobertura de acción y relacionamiento con empresas con las que no suele tener relación la facultad. De tal manera que las comunidades empresariales puedan tener un relacionamiento, de alto nivel, en el que Facultad pueda apoyarlos en sus desarrollos productivos, su innovación, su mejora de calidad, su capacidad exportadora y en general para abordar nuevos espacios de mercado.

 

Por su parte, Juan David Valencia, Gestor de Oportunidades del CD+i quien lideró este proceso, expuso que la pertinencia de participar en esta convocatoria, es que estaba alineada con una apuesta de fortalecer las capacidades del CD+i, el rediseño del portafolio de los servicios de la Facultad de Minas, incluso también el análisis y rediseño de las marcas de conocimiento. Y además, el CD+i se encontraba en un proceso de acreditación por parte de MinCiencias para ser reconocido como actor del sistema de ciencia, tecnología e innovación, y por eso, nos dieron el reconocimiento como Centro Desarrollo Tecnológico (CDT).

 

¿En qué consiste el programa?

 

Juan David Valencia explicó que, INNpulsaTEC es una iniciativa que busca que las entidades de soporte al ecosistema de innovación (ESEI), que en este caso el CD+i como entidad dependiente de la Universidad Nacional de Colombia, Sede Medellín; fortalezcan sus capacidades para transferir sus sus servicios o tecnologías a las Pymes. Es decir, acercar la oferta de las entidades a las necesidades y demanda de las pequeñas y medianas empresas, que en muchas ocasiones por diferentes barreras como precios, recursos y otras variables; estén limitadas para acceder a servicios de investigación, ciencia, servicios de extensión e innovación que ofrecen diferentes universidades.

 

El programa consta de cuatro etapas. En la primera etapa, se realizó una identificación de la oferta de servicios y tecnología, con información que el personal del CD+i brindó de sus portafolios. Paralelamente, se desarrolló la etapa de fortalecimiento de las capacidades, es decir, un componente formativo para los integrantes del programa. En este se vincularon hasta 300 personas provenientes de las 25 entidades de soporte al ecosistema de innovación y desde la Facultad de Minas casi 30 personas que desde diciembre del 2020 hasta mayo del 2021, se reunieron cada jueves a los espacios virtuales de aprendizaje.

 

Valencia, manifestó que fueron aproximadamente 20 talleres y adicional a esas reuniones tenían otros espacios eventuales del grupo de trabajo para terminar diferente entregables o temas se desarrollaban en los talleres. “En estos espacios de encuentro de fortalecimiento, recibimos capacitación por medio de consultores externos en temas como el rediseño del portafolio de servicio, nos brindaron diferentes herramientas incluído estrategias para hacer un rediseño de nuestro portafolio, muy orientado al público de las pequeñas y medianas empresas. Tuvimos una segunda fase en entrenamiento comercial con consultores expertos en el tema, trabajamos seguimiento y relacionamiento con clientes, plan de cuenta, habilidades de negociación en tecnologías, procesos comerciales. Seguimos a un tercer módulo en entrenamiento comercial donde vimos temas como gerencia y crecimiento del negocio, pensamiento y plataformas digitales, planeación estratégica , patrones de la innovación y un último módulo en transferencia de conocimiento técnico, donde ahí nos dieron también más desde ámbito jurídico, talleres en tema de riesgo de cumplimiento, pues alrededor de la tecnología, comercialización de tecnología”. El centro de ese proyecto es el fortalecimiento institucional y el mejoramiento de capacidades del equipo del CDI+i, y otras personas de la Facultad que trabajan en unidades relacionadas con investigación, asesoría y/o consultoría. Esto a su vez, como resalta el profesor Ignacio Maya, coincide con que existe un grupo de actores que son pymes y que están buscando acompañamiento para la productividad. Entonces es un espacio donde la Facultad a través del CD+i puede entrar en ese nuevo segmento y generar una nueva relación con unos actores que siempre han estado allí, pero que no han sido el principal “foco de atención” de la Facultad.

 


Además, Juan David, resaltó que “algo muy importante es que el CD+i de la Facultad de Minas fue la entidad con mayor participación en número de personas. Es decir, el programa permitía fortalecer y brindar esas capacitaciones a máximo 16 personas por entidad, pero desde el CD+i solicitamos que nos dieran la posibilidad de vincular a más personas. Y de allí surge el CD+i ampliado, esta es en una apuesta que vincula a integrantes de los diferentes grupos de investigación, de laboratorios y personal administrativo. Entonces en ese grupo de personas no están solo los gestores de oportunidades, también están los gestores de proyectos que apoyan el proyecto en toda su planeación, ejecución y cierre. También tenemos profesionales de la vicedecanatura de investigación y extensión, tenemos profesionales de varios grupos estudiantiles que apoyan identificando oportunidades y formulando propuestas a varios grupos”. Esto permite que cada vez más personas de la Facultad, se encuentren preparadas para asumir los retos de la investigación e innovación que el CD+i requiere para el desarrollo de proyectos con otras empresas.

 

Ahora bien, la tercera etapa del programa es de transferencia de conocimiento a través de programas de capacitación desde las ESEI a las empresas, es decir, desde el CD+i hacia las pymes. El programa tiene una apuesta de abarcar a 400 pymes beneficiarias, quienes hicieron todo un proceso de diagnóstico y caracterización de su necesidades en temas de innovación, de proyectos de investigación de incluso identificar barreras a obtener o acceder a servicios de consultoría e innovación que brindan las universidades o centros de desarrollo tecnológico. Luego, las empresas se debían inscribir en ODOT, una plataforma de Ruta N que busca acercar la oferta de las universidades en servicios de innovación, servicios de extensión y grupos de investigación, a las demandas de las empresas. Nuestra obligación del CD+i en esta etapa, fue publicar en la plataforma los servicios con los que estuvimos participando en la convocatoria. Un primer servicio orientado a fortalecer a las pymes en marketing digital y otro servicio en temas de calidad y productividad. En relación a esto se han desarrollado talleres diarios durante 2 semanas, en los que se obtuvieron resultados positivos de participación.

 

 

 

Algo que destaca el Gestor Juan David, es que participaron 380 pymes y 25 entidades, y a cada uno le correspondían 15 pymes en promedio. Nosotros fuimos la primera entidad que cerró cupos, a pesar de que la UNAL Sede Bogotá también estaba participando en el programa, con otra entidad. Esto quiere decir que el equipo hizo una lectura acertada de las necesidades de estas pymes con la información de identificación y caracterización de necesidades.

 

En esta tercera etapa, el programa entregaba por cada pyme capacitada un vaucher de $762.550 (setecientos sesenta y dos mil quinientos cincuenta pesos). Entonces si las entidades lograron abarcar las 15 pymes, como es el caso del CD+i, recibieron un total de 15 millones 250 mil pesos.

 

Próximamente, iniciará la cuarta etapa de este programa y esta será la fase de conexiones entre el sector empresarial y las ESEI, donde el programa entrega hasta 45 vaucher de innovación, cada uno de hasta 18 millones, para que las pymes accedan a los servicios ofrecidos por las entidades y puedan desarrollar proyectos que beneficien a sus empresas desde diferentes aspectos.

 

El profesor Maya, expresó que lo que se espera de este relacionamiento, es “establecer, unas motivaciones o entusiasmar a estas empresas con las que hemos tenido relación en los talleres, para que se acerquen a la Facultad y podamos explorar el desarrollo de productos o de desarrollo tecnológico que aumente en el campo de la organización, en el campo de la manufactura, de los servicios de automatización de procesos. Es decir, hay muchos de los campos de la Facultad de Minas con que podemos apoyar a las empresas y poderles llegar con soluciones al alcance. También que ellos vean que acercarse a la universidad no es tan difícil y que está al alcance de sus posibilidades”.

 

Para concluir, el director del CD+i manifestó que el principal beneficio de participar en el programa INNpulsaTEC, es qué, “fortalecernos nuestra capacidad para entender ¿cuáles son las necesidades y las problemáticas que tienen este tipo de organizaciones, las pymes? Y ¿Cómo podemos organizar capacidades y recursos de la Facultad en beneficio de las pymes?, es decir, recursos docentes desde capacidades, recursos de laboratorio, capacidades de investigación de los docentes, de los estudiantes, de posgrado y de pregrado y por supuesto, de nuestros egresados. Entonces, con esas capacidades, organizar cómo podemos apoyarlos para elevar su productividad.

 

Por: ACG

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