Por: Juan Esteban Flórez Rueda, estudiante de Ingeniería geológica, Facultad de Minas, Universidad Nacional de Colombia.

 

La desigualdad de género viene ligada por una cultura de hace muchos años, se podría plantear desde los inicios de la humanidad donde a las mujeres se les ha visto como el sexo inferior por defecto, y eso lo demuestran “los antiguos griegos, quienes iniciaron la tendencia de ver el cuerpo femenino como un cuerpo «masculino mutilado»” (Criado, 2019). A pesar de que esto se decía hace mucho tiempo, en el transcurso de la historia y hoy en día, podemos decir que la mujer pagó y sigue asumiendo las consecuencias de que vieran su cuerpo como si fuera el de un hombre, por lo que los medicamentos, aparatos médicos e instrumentos de uso cotidiano -en la mayoría de los casos- están mal estructurados para las mujeres, o no responden a sus necesidades.

 

Un ejemplo claro de esto es que “el cuerpo femenino elimina el acetaminofeno (un ingrediente que se encuentra en muchos analgésicos), a un 60% del ritmo documentado en el cuerpo masculino” (Criado, 2019), y este medicamento no es el único que actúa diferente en el cuerpo femenino. Esto nos lleva a decir que, es una realidad que muchos objetos y artefactos están diseñados para los hombres.

 

Es importante tener en cuenta que, realmente “el movimiento feminista ha avanzado notablemente en la defensa de los derechos de las mujeres. Además, muchos académicos y activistas asumen que hay diferentes “olas” del feminismo” (National Women's History Museum, 2021), no obstante, a pesar de que haya diferentes tipos de feminismo es clave el hecho de que todos tienen una finalidad, y es que los derechos de las mujeres no sean vulnerados. Si miramos críticamente, podíamos llegar a entender que realmente el eje principal que encadena esa vulnerabilidad empieza desde las primeras épocas donde se plantea que el poder masculino permite ser líder y tomar las decisiones, dejando en algunos casos la decisión femenina vulnerada, incluso algunas personas se refugian en una comparación con los primates, en donde se dice que los machos por ser los más fuertes y agresivos son los que dominan; pero esto es una falacia ya demostrada en algunas investigaciones como las desarrolladas, por Jane Goodall estudiando chimpancés; Dian Fossey, con gorilas, y Birute Galdikas, con orangutanes, donde concluyeron lo siguiente:

“Al estudiar nuevas observaciones indicaban que muchos grupos de primates no tenían jerarquías de dominación y que, cuando existían, las hembras eran tan buenas como los machos para formar jerarquías estables. Cuando existía la jerarquía, no sólo se relacionaba con el tamaño, la fuerza, la edad o la agresividad, ni parecía estar correlacionada con el éxito reproductivo del macho, ya que en muchos casos eran las hembras las que escogían a sus compañeros de apareamiento y daban estabilidad al grupo, además, existía participación de los machos en la crianza de los pequeños y jerarquías mixtas” (Blázquez, 2011)

Partiendo de lo anterior, se ha demostrado que incluso en la naturaleza el pertenecer al sexo femenino no significa estar por debajo del varón. La periodista Angela Saini en su libro “Inferior: How Science Got Women Wrong” hace énfasis en que: “cuando un hombre y una mujer son puestos en competencia, ambos poseen todas las cualidades mentales en igual perfección” (Saini, 2017), realmente hay varios casos como en el ejemplo de los primates en donde las hembras también pueden construir una jerarquía organizada, funcional, y donde el varón también tiene una responsabilidad de crianza con sus hijos, por lo que también se podría llegar a concluir que realmente incluso la crianza es una responsabilidad compartida, relacional y no únicamente del sexo femenino.

 

La discusión anterior en la que se intenta demostrar que el dominio, las decisiones, y las responsabilidades que se deben llevar en una sociedad es algo que debe ser mutuo, lleva muchos años, pero algo importante que muchas veces no se resalta es el hecho de que los hombres deben tomar un rol activo para cambiar eso, porque de nada sirve seguir con la misma cultura y con las mismas acciones que violan y vulneran los derechos que las mujeres por su lucha han podido conseguir y siguen demandando. En algunos casos se piensa que el feminismo es algo único y exclusivamente del sexo femenino, incluso como lo menciona Chimamanda Adichie, “hay hombres que se sienten amenazados por la idea del feminismo. Creo que viene de la inseguridad que les genera la forma en que ellos no tienen “naturalmente” el control en calidad de hombres” (Adichie, 2014), a su vez ella plantea que:

 

“el mejor feminista que conozco es mi hermano Kene, que también es un joven amable, atractivo y muy masculino. La definición que doy yo es que feminista es todo aquel hombre o mujer que dice: “Sí, hay un problema con la situación de género hoy en día y tenemos que solucionarlo, tenemos que mejorar las cosas”. Y tenemos que mejorarlas entre todos, hombres y mujeres.” (Adichie, 2014)

 

Las mujeres merecen un mundo que este hecho y pensado también para ellas, y ese cambio empieza a partir de cada persona y especialmente de los hombres, porque si seguimos promoviendo nosotros como hombres toda la normalización que tiene la sociedad todo seguirá igual, realmente una acción que se debe impulsar para que haya un cambio significativo es que los hombres acepten que las mujeres en la actualidad siguen sufriendo una desigualdad económica, política, social y cultural. Cuando se acepte dicha desigualdad, se va a empezar a promover que realmente las acciones, pensamiento y normas no están bien en la comunidad, y cuando la sociedad se una sin importar si es hombre o mujer, llegaremos a vivir en una sociedad feminista, que a mi parecer tiene mucho significado con lo que define Adichie, dado que feminista es aquella persona, que sin importar su sexo (sea hombre o mujer), acepta que hay un problema con la situación de género en la actualidad, y al estar consciente de dicho problema se plantea buscar soluciones que mejoren las situaciones de desigualdad y vulnerabilidad hacia las mujeres.

 

Partiendo de lo anterior, es importante hacer un análisis en nuestro alrededor para poder empezar a plantear posibles soluciones, si queremos que nuestra comunidad realmente sea una sociedad feminista, que se interese y esté informada sobre los derechos de las mujeres; primero me parece relevante saber qué ideas tienen algunos hombres sobre todo esto, y por eso realicé 6 entrevistas semiestructuradas con compañeros de la carrera de ingeniería geológica para conocer sus impresiones. A continuación, haré un análisis de los resultados obtenidos.

 

Percepciones de algunos estudiantes de Ingeniería Geológica de la Facultad de Minas sobre los feminismos

 

Inicialmente es fundamental conocer qué tanto saben los hombres que entrevisté sobre los diferentes tipos de feminismos como: feminismo liberal, feminismo radical, feminismo socialista, ecofeminismos, feminismo cultural, feminismos afrodescendientes, entre otros, para así apreciar si realmente los hombres identifican y reconocen los movimientos feministas y la desigualdad de género que hay en la sociedad, lo cual sería lo óptimo para nuestra comunidad o si por el contrario, piensan que “la sociedad es igualitaria”. En esa vía la pregunta que realicé fue:

 

• ¿Cuál fue la primera vez que escucho la palabra “feminismo” y en qué contexto la escucho?

 

En las respuestas obtenidas se nota que la mayoría de las personas conocieron el término “feminismo” en la escuela o por una red social, pero lo realmente sustancial en esto es que no tuvieron una buena impresión sobre este término, y esto a su vez puede ser uno de los detonantes del alejamiento o el desinterés sobre conocer acerca de los feminismos, ya que se encuentran comentarios como:

 

• “La escuche de una mujer en el colegio, la cual estaba dando a conocer un caso de experiencia propia sobre una enfermedad de trasmisión sexual que la afecto a ella como mujer; por ese resentimiento que transmitía la persona, se vio que era un ataque más hacia el hombre.”

 

• “La primera vez fue hace 3 años, en Facebook, por una persona que se estaba quejando por mujeres que estaban marchando por ideales feministas pero que estaban haciendo también vandalismo a obras públicas.”

 

El analizar ese primer acercamiento nos da una perspectiva más clara de que realmente una de las soluciones que se deben realizar, es un acompañamiento desde las instituciones educativas sobre todo lo relacionado a las corrientes feministas y los logros que han tenido en términos de derechos humanos, pero este acompañamiento debe ejecutarse de la mejor manera, para que no se genere esa estigmatización que se da en torno al movimiento feminista en general.

 

• ¿Cuál es el primer pensamiento que tienes cuando se menciona la palabra feminismo?

 

Aunque aparentemente hay algunas respuestas con una connotación “positiva” del concepto del feminismo, es erróneo debido a que hay personas que piensan que este movimiento busca una superioridad, cuando realmente los feminismos parten de un ideal común, en el cual se busca que no haya desigualdad de oportunidades. Es entendible que tengan esta noción por lo que han visto en redes sociales y por esos acercamientos que tuvieron su primera vez con este término. A su vez es crucial plantear que la raíz del problema puede radicar en las malinterpretaciones de las corrientes feministas que provienen sobre todo de la desinformación y las creencias en ideas generalizadas.

 

• ¿Cuántas corrientes de feminismos crees que existen, o solo hay un feminismo universal?

 

Con los resultados a esta pregunta se confirma que hay un desconocimiento total referente a las corrientes feministas, dado que ninguna persona contestó bien a la pregunta realizada, incluso la mayoría de las personas coinciden en decir que hay dos corrientes, cuando realmente hay demasiadas corrientes (feminismo liberal, feminismo radical, feminismo socialista, ecofeminismos, feminismo cultural, feminismos afrodescendientes, entre otros), además de que coinciden en decir que hay un “feminismo universal”. Tal vez el no conocer las diferentes corrientes es entendible dado que los hombres no sienten interés por conocer a fondo realmente estas teorías (ocasionado en parte por los primeros acercamientos negativos que tuvieron hacia el feminismo), pero lo que si resulta preocupante es la desinformación que se evidencia en algunas respuestas como: “existen 2 tipos:  hembrismo (machismo femenino) y feminismo normal.”

 

Es clave ver como la desinformación que se genera en medios de comunicaciones o en diálogos con amigos, compañeros, familiares ocasionan que se llegue a errores de comprensión y desinformación, como el hecho de considerar al hembrismo como corriente del feminismo.

 

• ¿Cuál es el objetivo central de los feminismos?, ¿busca la superioridad de la mujer sobre el hombre?

 

Realmente se tienen respuestas muy interesantes, ya que hay incluso un cuestionamiento de los hombres sobre los ideales del feminismo como tal, pero a pesar de esto, las respuestas continúan evidenciando errores de comprensión y desinformación. Hubo una respuesta puntual, que dice:

 

• “El objetivo es la equidad, no considero que sea igualdad, por lo que la equidad tiene en cuenta las vivencias y aspectos particulares que tenga una persona (como el embarazo de una mujer) y establecer acciones concretas para subsanar las desventajas para que todo puedan partir de una posición igualitaria.”

 

La definición que propone la persona puede entenderse como “acertada”, porque incluso es una discusión que se dio en su momento sobre si los feminismos buscaban la equidad o igualdad; pero realmente en la actualidad y en las corrientes feministas se tiene claro que es una igualdad, pero se trata de una igualdad de oportunidades, es decir que una mujer tenga las mismas posibilidades para entrar en un empleo, que pueda tener el mismo aumento de sueldo, que tenga la misma posibilidad de entrar a una universidad (desigualdad que se presenta en la Universidad con el porcentaje de admitidos por carreras), entre otras situaciones que se puedan presentar. Volviendo a la respuesta, se puede decir que hay de pronto una confusión con la definición, que ha visto en redes sociales o en diálogos con otras personas, debido a que la persona consideraba era igualdad biológica o condiciones que una mujer afronta como lo es el embarazo y como no lo afronta el hombre, esto puede ser más discutible pero lo que interesa aquí es ver que el objetivo principal del feminismo es la igualdad de oportunidades como tal.

 

• ¿Un hombre puede pertenecer al movimiento feminista?

 

Se resalta que, aunque todos dudaron esta respuesta, acertaron en que realmente si pueden llegar a ser feministas y apoyar todo este movimiento, incluso algunas respuestas destacan que para poder estar en dichas corrientes feministas primero es sustancial conocer y aceptar los ideales propuestos por los distintos movimientos, a su vez también se nota que aunque hay un desconocimiento sobre los tipos de feminismos, conocen el feminismo radical, en el cual si es un poco más delicado que un hombre participe en este, pero conocen que a pesar de que este no les permita estar de pronto en marchas no es un impedimento para apoyar a los feminismos.

 

Conclusiones

 

Observando las respuestas obtenidas, es evidente que el problema radica es en el primer acercamiento al termino “feminismo”, porque este es el detonante a que la mayoría de los hombres se alejen por completo de todo este movimiento, debido a que en algunos casos se sienten atacados o sienten que esto es solo para las mujeres. Es por ello qué se debe realizar campañas formativas desde el colegio, para que los hombres sepan lo que realmente estas corrientes feministas fundamentan desde lo académico y desde los movimientos sociales.

 

Ahora bien, es cierto que ya en la Universidad de por si hay un desconocimiento y desinformación ampliada en referencia con este tema, lo cual se vio reflejado en las respuestas obtenidas, que viene ligado a lo mencionado anteriormente, ya que la mayoría de hombres no siente interés por conocer estos temas, de este modo la implementación de la electiva de la Facultad de Minas: El Retorno de las Brujas: mujeres en la ciencia y equidad de género en carreras STEM, es una buena oportunidad para que los hombres conozcan realmente que son los feminismos, y no pasen desapercibidos todo lo que está detrás de esto; como fue mi caso en el que tenía un pensamiento sesgado y negativo sobre los movimientos feministas, por cosas superficiales que aparecen en las redes sociales o comentarios con familiares, amigos y allegados.

 

Para finalizar, creo que es importante dar a conocer que los hombres realmente pueden participar activamente en este movimiento para que desaparezca esa estigmatización que hay en torno a los feminismos, y esto se puede llegar a dar realizando campañas dentro de la Universidad o en redes sociales, con títulos como por ejemplo: “¿Puede un hombre ser feminista?”, “¿Un hombre puede apoyar a los feminismos?” e imágenes llamativas que provoquen un interés, haciendo que los hombres sientan curiosidad y puedan aprender e informarse de este tema, para que así salgan siendo personas feministas que apoyan y no están de acuerdo con las desigualdades que viven las mujeres, promoviendo a su vez en su día a día cambios de actitudes en cada persona. El cambio de una sociedad empieza por cada uno de sus miembros y cuando la mayoría de hombres acepten y sepan que pueden ayudar a este cambio, la sociedad podrá cambiar todas las acciones negativas de la religión, cultura, política y económica qué se viven en la actualidad.

 

Referencias bibliográficas

 

• Adichie, C. N. (2014). Todos deberíamos ser feministas. Abuya: Random House Mondadori .

 

• Blázquez, N. (2011). El retorno de las brujas. Incorporacion, aportaciones y criticas de las mujeres a la ciencia. México: Comité editorial del CEIICH.

 

• Criado, C. (2019). La mujer invisible. España: Titivillus.

 

• National Women's History Museum. (5 de Abril de 2021). National Women's History Museum. Obtenido de National Women's History Museum: https://www.womenshistory.org/exhibits/feminismo-la-primera-ola#:~:text=La%20primera%20ola%20del%20movimiento,otros%20movimientos%20de%20prop%C3%B3sitos%20reformistas.

 

• Saini, A. (2017). Inferior: How Science Got Women Wrong. 4th Estate.