Bogotá 13 de septiembre de 2019 Created by Fin/ALP/MLA/LOF N.º 680
La influencia que el chorro del Chocó podría tener sobre el clima, la meteorología y la hidrología de la Costa Pacífica colombiana "uno de los lugares más lluviosos del planeta" fue estudiada por un grupo de investigadores de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Medellín dirigido por el profesor Germán Poveda Jaramillo, del Departamento de Geociencias y Medio Ambiente en la Facultad de Minas.
Esta corriente de vientos entra superficialmente desde el océano Pacífico hacia el interior de Colombia, transportando gran cantidad de vapor de agua que al condensarse en la atmósfera causa las extraordinarias lluvias de la región y que hacen que en ciertas zonas de departamentos como el Chocó caiga agua 300 días de los 365 del año.
Según explica el profesor Poveda, el chorro del Chocó es uno de los principales moduladores del clima en el Pacífico Tropical Oriental y el mecanismo físico que explica la existencia del lugar más lluvioso de la Tierra: un municipio del Pacífico colombiano que curiosamente recibe el nombre de Lloró.
Además, es fundamental para explicar la dinámica de los Sistemas Convectivos de Mesoescala (SCM) que se forman sobre el océano Pacífico. Estos son unas estructuras atmosféricas consideradas como las potenciales generadoras de climas adversos, que pueden durar más de 24 horas y contribuyen con el 80 % de las lluvias en la región.
En la investigación "que contó con el apoyo de instituciones como la Fuerza Aérea Colombiana, la DIMAR de la Armada Nacional y el Desert Research Institute (DRI) del Sistema de Educación Superior de Nevada, EE. UU." se realizaron por primera vez mediciones directas de esta corriente de vientos por medio de cuatro campañas de campo en 2016, en las que se usaron radiosondas, unos instrumentos a bordo de globos meteorológicos inflados con helio que midieron las variables de la atmósfera.
Dos de estas campañas de mediciones fueron sobre el océano Pacífico y las otras dos sobre el continente, en Quibdó, con el propósito de cuantificar las diferencias entre los procesos que se presentan entre las interacciones océano-atmósfera y suelo-atmósfera. El diseño experimental buscó cuantificar la variabilidad diurna anual e interanual del chorro del Chocó.
La información recolectada permitió conocer mejor cómo el chorro del Chocó influye en la variabilidad climática, contribuyendo a entender la dinámica de la atmósfera, a evaluar el desempeño de diversos modelos climáticos y a mejorar los pronósticos de las variables hidrológicas a partir de modelos estadísticos y físicos con datos más precisos, que permitieron construir índices para usar como predictores del comportamiento de los caudales de los ríos en la región.
Reconocidos por la FAAE
Esta investigación, pionera en su campo, recibió este año el premio de la Fundación Alejandro Ángel Escobar (FAEE) en la categoría de "Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible" como un reconocimiento a los aportes que se hacen sobre el conocimiento del clima en el Pacífico colombiano.
Para el profesor Poveda, quien ha recibido este premio en cuatro ocasiones (1999, 2000, 2007 y 2019) y es el único docente activo de la UNAL que forma parte de la Misión Internacional de Sabios 2019, convocada por el Gobierno nacional, el premio de la FAEE es el reconocimiento científico más importante que se da en Colombia.
"Es un gran honor haber trabajado en un proyecto tan importante para nuestro país y de tan alto rigor científico, aunando esfuerzos nacionales e internacionales. La unión de las instituciones involucradas en la era del posconflicto marca un hito en Colombia, indicando un camino de cooperación entre la UNAL, la Fuerza Aérea y la Armada Nacional, que se podrá potenciar con amplios beneficios para el país", asegura el docente.
Agrega que el hecho de que el proyecto del chorro del Chocó reciba este reconocimiento permite visibilizar la importancia del Pacífico colombiano y los procesos que allí ocurren para explicar parte de la variabilidad climática del norte de Suramérica y del sur de Centro América.
"Resaltar la importancia del sitio más lluvioso del mundo y del bosque de la región Chocó-Darién como un punto crítico de biodiversidad, contribuye a profundizar los esfuerzos encaminados a la conservación de esta región altamente vulnerable", comenta el docente.
La relevancia de lo conseguido con este proyecto de investigación propició la participación del grupo de investigación que dirige el profesor Poveda en el proyecto Organization of Tropical East Pacific Convection "organizado por científicos de EE. UU., México, Costa Rica y Colombia", financiado por la National Science Foundation, que busca implementar un programa de observaciones en el verano de 2019 sobre el Pacífico oriental, incluyendo a Colombia, para seguir avanzando en la caracterización de las condiciones de la atmósfera que explican la presencia del sitio más lluvioso del planeta sobre la costa Pacífica colombiana.