El establecimiento de la segunda etapa de REDAIRE se debe a la iniciativa de las universidades que insistieron ante las autoridades municipales y ambientales, contraloría municipal y personería de Medellín para revivirla.

En octubre de 2000, según el Convenio Interinstitucional No. 394 de 2000 de Área Metropolitana del Valle de Aburrá, se protocolizó el convenio de cooperación científica y tecnológica entre el Área Metropolitana del Valle de Aburrá, Corporación Autónoma Regional del Centro de Antioquia -Corantioquia -, Universidad de Antioquia, Universidad de Medellín, Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid, Universidad Pontificia Bolivariana y Universidad Nacional de Colombia - Sede Medellín.

Se estructuró así una Red de Vigilancia de Calidad del Aire para el valle de Aburrá (REDAIRE). Esta es una propuesta interesante, en la cual, se conjugan los esfuerzos y recursos financieros de la autoridad ambiental, el suministro de equipos de la antigua Red de Monitoreo de Aire, y la capacidad técnica e investigativa de las Universidades. Para reiniciar la Red se cuenta con un presupuesto de doscientos millones de pesos para un año.

A partir del año 2002 se prorroga el convenio por cinco años y se invita a participar al IDEAM para fortalecer los vínculos con las autoridades ambientales nacionales y facilitar el flujo de información meteorológica y climatológica necesaria para interpretar muchos fenómenos de contaminación del aire.

Los resultados que presenta REDAIRE en confiabilidad de la información de aire, compromiso con un presupuesto austero y de bajo costos, oportunidad en la presentación de la información y los proyectos de investigación y desarrollo son garantía de un desarrollo académico y tecnológico de mucha utilidad para el país en el manejo de la calidad del aire.