Este texto es un ejemplo
1. Empiece a ahorrar
En la juventud, es cuando usted empieza a tener sus propios gastos e ingresos, por lo que adquirir el hábito de ahorrar es indispensable; no es necesario ahorrar grandes montos, puede abrir un plan de ahorro desde $50.000 mensuales.
Organice su presupuesto semanal o mensualmente, y deje siempre un porcentaje para el ahorro. Entre más joven lo haga, menos dolores de cabeza por problemas financieros tendrá en la vida adulta.
2. Tenga cuidado con las tarjetas de crédito o con créditos informales
Es muy común que en los años de juventud varias entidades financieras ofrezcan tarjetas de crédito motivando a las personas a iniciar su vida crediticia, factor que es muy importante y que será clave cuando quieran solicitar créditos para comprar carro, casa, estudiar, etc.
Sin embargo, hay que ser muy responsable con los gastos que se asumen con estas, pues al ser la primera tarjeta, se puede llegar a pecar por exceso de uso, colgarse en los pagos, diferir las compras a demasiadas cuotas, entre otros factores que afectan la vida crediticia más adelante.
También los amigos o conocidos pueden ofrecerle créditos de fácil acceso, a los que les debe prestar mucha atención, porque casi siempre cobran tasas de interés exageradas y los métodos de cobranza pueden ocasionar problemas.
3. Establezca metas personales
Tener un objetivo claro lo ayudará a organizar mejor las actividades que debe seguir para alcanzarlo.
Fíjese una meta en todos los aspectos de su vida, tanto personal como financiera, y de esta manera le será más fácil ahorrar, organizar sus créditos, inversiones, etc.
4. Realice una planificación financiera
Esto se resume en ser organizado con las finanzas. Establezca un presupuesto en el que tenga claros sus ingresos y gastos, de esta manera podrá ver qué dinero está gastando de más, y cuánto puede ahorrar para inversiones futuras.
5. Evita los gastos hormiga
Snacks, recargas de celular, cigarrillos, entre otros, son gastos muy comunes cuando se es joven y que a simple vista pueden parecer insignificantes, pero en realidad afectan el bolsillo más de lo que se cree.
Trate de minimizar estos gastos al máximo y ahorre. Verá que a final de mes tendrá una cantidad de dinero interesante que puede invertir en algo que le guste más o le dé más provecho.