Escudo de la República de Colombia

El proyecto fue creado por un grupo interdisciplinario de estudiantes de la Facultad de Minas en el curso de Seminario Proyecto en Ingeniería II.

 

Una pila tarda entre 1.000 y 2.000 años en degradarse. Además trae graves consecuencias para la salud debido a la contaminación de sus metales pesados y compuestos. Esas razones fueron las que llevaron a un grupo de estudiantes a idear un sistema de recolección de los desechos de pilas alcalinas y de zinc-carbón para transformarlas y reutilizarlas en procesos industriales.

 

David Enrique de Jesús Guzmán Gallo, estudiante de Ingeniería de Minas y Metalurgia e integrante del grupo investigador, aseguró que el proceso consiste en descomponer las pilas alcalinas y obtener de ellas zinc, manganeso y ácido sulfúrico, para fabricar otras o para que tenga otros usos en la industria del galvanizado, la cerámica o aleaciones.

 

“Colombia genera, en un año, cerca de 11.000 toneladas de desechos de pilas, de las cuales 8.000 son alcalinas y de zinc-carbón. El componente importante de este proyecto es que luego de la reincorporación de los metales se impactaría directamente la industria nacional puesto que el Zinc y el Manganeso, actualmente, se deben importar, y con esta idea se producirían. Además se cumpliría con la ley 1297 de 2010 que exige a las empresas productoras reciclar los desechos y disponer de ellos de una manera correcta y así mitigar el daño ambiental”, explicó Jesús Guzmán.

 

Los metales que contienen las pilas generan grandes afectaciones al sistema nervioso central, al sistema digestivo y  renal, además pueden ocasionar problemas hepáticos, entre otros efectos adversos. Por eso es fundamental su método de reprocesado. Este consiste en la reutilización de gran parte del contenido con el que están fabricadas, para ello es necesario la lixiviación neutral, ácida y la electrodepositación.

 

“La lixiviación consiste en extraer algo de un sólido mediante un disolvente; así, es neutra cuando es con agua y ácida cuando lo que se disuelve es un ácido. La electrodepositación consiste en separar componentes de una mezcla usando una corriente eléctrica”, afirmó Jesús Guzmán.

 

Agregó que el reprocesado consiste principalmente en métodos metalúrgicos para hacer la transformación de la materia, convencionalmente en la industria se utilizan equipos de combinación como lo son trituradoras y molinos, pero dentro de su proyecto optaron por el diseño de una máquina que hiciera el trabajo evitando altos costos, más consumo energético y contaminación auditiva.  El equipo que, el grupo de estudiantes, diseñó no lo han encontrado patentado en ningún lugar, esto amplió el interés de realizar ese proceso.

 

El primer paso es la recolección y el transporte del material hasta la planta, allí se separan las baterías por partes y se desmantelan; dependiendo de qué parte sea se le hace un tratamiento específico. La planta procesaría aproximadamente  300 toneladas al año y la inversión inicial sería de 300 millones de pesos, incluyendo la nómina de los trabajadores, las capacitaciones, y los gastos para la consolidación de la compañía.

 

“En la empresa se estaría vendiendo el zinc y el  dióxido de manganeso que se extraería de las pilas y asimismo se negociaría con otras industrias, o incluso con las mismas organizaciones que las elaboran”, explicó Jesús Guzmán.

 

El zinc es utilizado en la industria de las aleaciones y del galvanizado y para fabricar fertilizantes mediante sulfatos. El dióxido de manganeso también sirve para la industria de las aleaciones y la cerámica.

 

En otros países reprocesar una tonelada cuesta entre 100 y 400 dólares  y con este proyecto costaría más de 143 mil pesos.  Actualmente no existen diferentes estrategias para la recolección de este material, sin embargo el desecho de las pilas es guardado para mitigar el impacto ambiental y no tienen uso o valor comercial.

 

Por: AMR

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